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“Maldito imperio, mil veces maldito”

Frontera entre Colombia y Venezuela

por Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social/Periodista Colombia

Cada vez que Chávez quiere expulsar a alguien de su territorio y evitar explicaciones sobre casos puntuales, expone que está siendo victima de espionaje. Lo hizo en 2004 cuando quiso sacar a la DEA y acabar con un acuerdo de cooperación militar con Estados Unidos que llevaba 50 años de existencia.

El ministro del Interior venezolano, Tareck El Aissami, descendiente de activistas sirios y defensores de Saddam Hussein; explicó ante el parlamento venezolano que tenía pruebas de espionaje en contra de las milicias bolivarianas y un supuesto testigo clave que podría explicar los proyectos de asesinato y derrocamiento hacia el Presidente Hugo Chávez; fundados en tres operaciones: Falcón, Salomón y Fénix. Además de la captura de miembros del DAS colombiano, atribución que fue desmentida por el Director del Organismo, quien aseguró que estos hombres no pertenecen a la Institución.

Colombia se sorprendió cuando vio que el testigo clave era el ex director de Informática del DAS, Rafael García, quien siempre ha sido desestimado como mentiroso por autoridades colombianas, y aunque no tiene permiso para salir del país, apareció en Venezuela. También está Hugo Armando Carvajal, director General de Inteligencia Venezolana y quien en el portátil de Raúl Reyes fue nombrado por ofrecer armas y lanzacohetes suecos a las FARC, suceso que aún este gobierno no explica a Suecia.

“Cualquier país tiene obligación de autodefensa y los colombianos deben reconocer que Chávez ha atacado su seguridad, y se convierte en una amenaza seria para la región”, explicó Roger Noriega, ex Subsecretario de Estados Unidos para Latinoamérica.

Chávez se hace la víctima, aunque el mundo conoce que él hace contrainteligencias en otras naciones, pero cuando se le exige una explanación, solo argumenta que es atacado por el “Imperio” y sus mascotas, mostrando una actitud tediosa, falsa, charlatana, grosera y peligrosa. ¿Por qué los demás gobiernos de la región están silenciosos? Por un lado, falta de liderazgo en los gobernantes, otros se callan por los regalos o favores recibidos, y países como EUA, solo evitan provocaciones y eludir la basura discursiva del Presidente.

A través de un proyecto que fue expuesto por un senador republicano de Estados Unidos, se le pide al Presidente Barack Obama, que incluya a Venezuela en la lista de los patrocinadores del Terrorismo, por causas, que hoy escandalizan al mundo y ponen en reflexión la figura y los alcances del mandatario latino: El aumento del tráfico de drogas desde Venezuela y los vuelos clandestinos desde el Estado de Apure, que no son sancionados por autoridades de la región, lo que conlleva a contrarrestar las intenciones del Gobierno mexicano y a plantear que Chávez sostiene una red que ataca a las instituciones y la seguridad de América Latina y EUA.

Seguidamente, el apoyo de Venezuela a grupos armados ilegales, tales como la FARC, quienes lideran el 60% de la producción de droga en Colombia. Relaciones que pueden ser respaldadas en los archivos hallados en el computador de abatidos jefes guerrilleros. La respuesta del Gobernante contra EUA fue: “Maldito imperio, mil veces maldito, algún día te hundirás en el oscuro hueco del olvido”

Para armar este rompecabezas, tenemos que Chávez evita con vehemencia, la explicación de la masacre contra 11 colombianos en el Estado del Táchira, Venezuela. Sus intereses bélicos frente a Colombia son cada vez más visibles y el odio que sostiene hacia el “Imperio Norteamericano”. Chávez ha cruzado el límite del abuso de poder, y los gobiernos deben prestar sumo cuidado, con el objetivo de atenuar su conducta, desmantelar la peligrosa red que desestabiliza la seguridad de América, evitar una guerra contra Colombia, el ataque de la lucha de México contra el narcotráfico e impedir que subvierta la democracia regional.


About Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social con énfasis en Periodismo Digital y Cibermedios.Desde que inició sus estudios profesionales se interesó por la investigación, la docencia universitaria, el periodismo y la comunicación organizacional. Temas que lo llevaron a coordinar el semillero de investigación “Análisis del Discurso”, en la Universidad EAFIT.