La OEA se ha vuelto un organismo muy débil

por Jorge Uribe Piedrahíta

Comunicador Social/Periodista Colombia

La poca participación de la Organización de Estados Americanos en asuntos relevantes en la región, ha gestado la disminución de la credibilidad de su funcionamiento y del secretario José Miguel Insulza, quien se ha postulado para una reelección en su cargo; suceso que genera desconfianza y produce fuertes críticas con relación en las débiles reacciones que ha tenido en casos de extrema opresión.

El ex canciller de Chile, Insulza, ha guardado silencio frente a evidentes ataques a los sistemas e instituciones democráticas en países como Venezuela y Honduras. Revelando la decadencia de la OEA frente a la defensa colectiva de la democracia regional. Ante su reelección, ya suma el apoyo brasileño, chileno y centroamericano para los comicios del 24 de marzo.

“Insulza es un hombre estratégico y calculador: primero, repudia e interviene en los golpes de estados hacia gobiernos izquierdistas como Venezuela en 2002 y Honduras en 2009; pero no ha implementado ninguna acción para impedir que Chávez acabe con la democracia y los medios de comunicación; nunca se ha pronunciado en contra de los ataques hacia el presidente Uribe y el Estado colombiano,” expresa Gustavo Gaviria, politólogo.

Lo claro es que la OEA ha fracaso en sus funciones y se convierte en un organismo obsoleto para la defensa de las soberanías y la normalización de guerras, conflictos sociales y relaciones bilaterales entre naciones que han decidido sellar vínculos político -comerciales. Lo más sano para muchos países es hacer un retiro masivo y dejar de financiar una Institución que pierde cada vez más visión y misión en el mundo.

¿Cuáles han sido los pronunciamientos o la posición de la OEA frente a temas tan relevantes en la región tales como: el cierre del canal RCTV, las deformaciones a las cartas magnas de los presidentes que han querido prolongar sus mandatos y permanecer en el poder o las violaciones a los derechos humanos de los venezolanos?

Sin embargo, Insulza ha actuado como Herodes, y en un lavamanos ha metido sus extremidades para defenderse de cualquier acusación, abogando por los intereses colectivos más que por los individuales. Además, pregona ante el mundo, que su poca acción se debe a las muchas limitantes que tiene su cargo.

“Colombia ha perdido muchas batallas en la OEA, organismo que siempre postula para enviar acusaciones contra atropellos o quejas por malos comportamientos o injurias de sus vecinos; hoy esta Organización es más simbólica que proponente y proactiva. Insulza no merece ser llamado de nuevo para ejercer la Secretaría General,” indica Camilo Zapata, analista geopolítico y de asuntos legislativos.

La OEA merece un líder que sea capaz de posicionarlo y que le genere un respaldo, a través de su impecable trayectoria política; para muchos postular al premio Nobel y presidente de Costa Rica Óscar Arias; a Michaelle Bachelet o al mismo Luiz Inacio Lula Dasilva; sería un acierto por la calidad de sus mandatos, la objetividad de sus acciones y el posicionamiento como líderes mundiales. El problema es que ellos determinan que la OEA se ha vuelto un organismo muy débil.