La recuperación que vino de fuera.

por Rodrigo Llop Fernández

Economista/México

En México se nos ha repetido hasta el cansancio que en esta ocasión, no tuvimos culpa de la recesión que estamos viviendo. Se buscaron mil maneras para explicar que ésta se generó en Estados Unidos y se contagió a México, no por problemáticas internas, si no por los famosos Ninjas (No Income, No Job, No Asset), por el rescate de algunas instituciones, los contagios a otras economías etc. Las campañas de mercadotecnia del gobierno se han  dirigido hacia ese entorno. En el 2007, México creció un mediocre 3.4% sin recesión, sin problemas y en un entorno completamente distinto al actual y nada o nadie a quien culpar.

Pese a las recomendaciones de varios premios nobel y en contra de lo que muchos países hicieron, en México decidimos incrementar los impuestos en diferentes rubros como IVA n(del 15 al 16%), telecomunicaciones (3%), juegos y sorteos (del 20 al 30%), tabaco, cerveza y bebidas alcohólicas  e ISR (del 28 al 30%) para balancear la caída de ingresos en el sector público provenientes del petróleo y recaudación tributaria entre otros.  Nunca se vio un esfuerzo por desarrollar estrategias para incrementar recaudación tributaria, inversión en extracción y modernización petrolera.

En el reporte publicado el día de hoy por la Cepal titulado Balance preliminar de las economías de América latina y el Caribe 2009, se describe un panorama positivo para el 2010 para la región. Una recuperación del más del 4% para América Latina. Sin embargo para México se describe una recuperación solventada principalmente por la recuperación estadounidense y encabezada por un incremento en las exportaciones y en las remesas. La Cepal no habla sobre resultados de recuperación económica basados en las acciones tomadas por el gobierno… simplemente esperando a que la recuperación llegue de fuera, al igual que la crisis llegó de fuera.

Se cita en dicho reporte: “La economía mexicana entró en recesión a partir del último trimestre de 2008, lo que puso de manifiesto sus insuficiencias estructurales, su vulnerabilidad frente a los choques externos y la debilidad y escasa resiliencia del aparato productivo, así como el reducido margen de maniobra de la política pública para contrarrestarlos”. Por desgracia llegó de fuera porque no estábamos preparados para contrarrestarla y ahí el resultado: Mexico es el país que de peor manera manejo la recesión en todo el mundo con una caída del 7%, por mucho la mayor caída de Latinoamérica.